martes, 6 de septiembre de 2016


coja

mis pares  han quedado cojos
la sombra va y viene con negros y pesados pasos
  asi desprovista pedi al cielo un canto celeste
un destello de estrellas iluminándome los parpados
un presente vivo
han de llegar asi las sombras en condena eterna
la tarde envejecida ha perdiendo su vuelo virtiendo sus lagrimas sobre mi ataud abierto

y negra negra oscura me torno
que se vierta ya la sangre y que la oscuridad me abandone en silencio






El muchacho

me observa
               creyendo que del otro lado el dardo del rostro               no recaería sobre el
le mire cruzando las piernas
entretejiendo su perfume
aroma clandestino, indecente y casi violento
hacías el loco y volteabas imaginandome cerca
te colaste como veneno,avivando la sangre antes de la caída de bruces y el  crujir de la carne antes de la muerte
me desmientia entre el vértigo del amorío impuro
      
          y así deslucido bebes un trago, la misma hiel del deseo, amargo, calando el vacio que traias de aventuras pasadas
             y te vas, lleno de vapores, miserable
 añorando el momento oportuno
para luego ignorar
 muchacho
y asi sin mas regresas perpetuo a tus amarguras